La compleja cirugía se realizó en Buenos Aires y es la primera operación de este tipo en Latinoamérica. La paciente es una niña de 2 años que vive en Salta capital. En un mes escuchará por primera vez.
Luciana Cazón Ramos tiene dos años y nació sin cócleas ni nervio auditivo. Gracias a una novedosa técnica que estimula directamente el cerebro, en un mes podrá escuchar por primera vez en su vida. El equipo médico y quirúrgico argentino a cargo del otoneurocirujano Vicente Diamante y el neurocirujano Jorge Salvat realizaron el primer implante auditivo de tronco cerebral infantil de toda América, y fue la pequeña salteña la paciente intervenida.
De lo que se pudo saber hasta ayer, Luciana vive en la ciudad de Salta, nació con agenesias -desarrollo defectuoso- del nervio auditivo y cócleas por lo que su sordera es total. Tras el implante, la niña evoluciona favorablemente y se estima que en un mes la cicatrización permitirá conectar el dispositivo.
Diamante y Salvat son dos prestigiosos científicos que realizaron esta cirugía por primera vez en Argentina, en 1997 y en un paciente adulto. Es la primera vez en el continente que este dispositivo se coloca en un niño tan chico.
Implante auditivo
Para colocar el implante auditivo de tronco cerebral se debe realizar una microcirugía intracraneana de altísima precisión. El dispositivo provee percepción del sonido a través de electrodos implantados directamente en los núcleos de la audición en el tronco del cerebro.
Gracias a este oído biónico, las personas que más complicaciones tienen para tratar su sordera con otras alternativas están cada vez más cerca de percibir que el mundo tiene sonidos.
Un drama muy frecuente
Las estadísticas señalan que 5 de cada 10 mil menores de 2 años padece de hipoacusia severa. Este desorden afecta el desarrollo del lenguaje y en consecuencia, su aprendizaje. La participación de estos niños en el mundo que los rodea es mínima, produciendo serias dificultades para su integración social. Los padres se ven obligados a tomar serias decisiones cuando sus hijos padecen hipoacusia severa o profunda bilateral y reciben un limitado beneficio de los audífonos. O cuando la hipoacusia de sus hijos es postlingual (luego de adquirir el lenguaje) y quieren restablecer la habilidad para hablar. El mundo está hecho para los oyentes y poder escuchar es imprescindible para la comunicación y la integración social. Además, hay razones de seguridad: los padres quieren que sus hijos escuchen alarmas de incendios, bocinas de autos y a las personas.
El problema de los costos
Otro tema de preocupación más allá del proceso de toma de decisiones, es el costo de estas intervenciones. Hay también gastos adicionales para los padres. Como se demuestra, los padres se enfrentan a obstáculos financieros, emocionales y de logística. Los padres deben tomar la decisión y se basarán en su situación particular. Y el Estado debe obligar a las obras sociales a hacerse cargo de estas tecnologías cada vez más complejas.
la presentación
El próximo jueves, en Capital Federal, los dos médicos que hicieron el implante a la pequeña Luciana, presentarán públicamente el caso.
La conferencia fue convocada por la Fundación de Otorrinolaringología y el Centro de Implantes Cocleares, en Pasteur 740, a las 11.
