Lunes, 5 de Diciembre de 2005 - Avances
Perfeccionan expertos de la UNAM un aparato auxiliar contra sordera

México.- Expertos en ingeniería electrónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) perfeccionan un prototipo auxiliar para las personas que padecen hipoacusia o sordera de leve a moderada, cuyo precio sería más accesible a la población.

Los ingenieros del Laboratorio de Electrónica del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (CCADET) de la UNAM también desarrollan un artefacto para problemas más severos de este tipo, cuyo precio sería más bajo que los de fabricación extranjera, se informó en un comunicado.

El grupo de expertos, dirigido por Miguel Angel Bañuelos, ha hecho pruebas de electroacústica en su nuevo prototipo y también en individuos que necesitan un auxiliar para poder oír.

Para ayudar a esas personas, en especial a las de escasos recursos, los científicos trabajan en un artefacto eficaz y de bajo costo ya que los auxiliares auditivos que se comercializan son importados de Estados Unidos y Holanda, por lo que se venden en unos 1140 Dolares Estadounidenses, mientras el que desarrolla la UNAM con componentes nacionales tendría un costo de 142,50 Dolares Estadounidenses.

El aparato es una pequeña caja plástica de diez por cinco centímetros que cuenta con un sensor de entrada, preamplificador, filtros y amplificador de salida. Posee un bloque de entrada; el micrófono, que convierte la presión sonora del ambiente en una señal eléctrica; luego se pasa a la etapa de preamplificación, para darle potencia a esa señal, que corre por una serie de filtros para ajustarse a la deficiencia auditiva de cada persona en específico.

"Hay quienes pierden la sensibilidad de señales de baja frecuencia, o de alta; por ello hay que ajustar los potenciómetros, que son dispositivos electrónicos para darle mayor "ganancia" a las frecuencias que captan menos", menciona el comunicado.

A diferencia de los dispositivos comerciales, que se colocan detrás de la oreja o dentro del canal auditivo y usan baterías especiales, el diseñado por los universitarios es de caja y puede llevarse en el bolsillo o cinturón.

Lo anterior tiene la ventaja de que es menos fácil de perder si el usuario es un niño, además de que usa pilas "AA", las cuales duran dos semanas en promedio con un uso continuo.

A la fecha se han interesado por este prototipo tanto pacientes como la industria; uno de esos casos es el acercamiento con la empresa Arroba Ingeniería.

En el CCADET, el cual se ubica en Juriquilla, Querétaro, se tiene el plan de armar más piezas para que sean probadas por la contraparte comercial y para ponerlos a disposición de personas interesadas, y de esa manera evaluar su funcionamiento, a modo de "pruebas de campo".

FUENTE: NOTIVER