Entrevista a la Presidente del Ente Nacional de Sordomudos (ENS),
de Italia. Traducida por Ernesto Carlos Davis de Vincere del mes de
mayo de 2004.
En el respecto de la resolución de la Unión Europea, los
franceses están ya insertando la Lengua de Señas, en los
programas elementares escolástico.
Pero solo, si la escuela se abrirá totalmente, el niño
no oyente podrá ser medio en condición de comunicar con
el mundo, en manera completa.- Y, en esto, Italia puede ser un país
de vanguardia. Es el sueño de Ida Collu, Presidente
del Ente Nacional de Sordomudos (ENS).
Es un continente inexplorado, separado, diverso, un archipiélago
indefinido y rarificado, donde los habitantes comunican en lengua desconocida,
hecha de señas, de expresiones, de gestos, de símbolos.
Es un planeta, donde viven hombres, mujeres y niños que sonríen,
lloran, sufren, divierten como todos y como todos aman y sueñan,
pero diversamente de todos nosotros, no pueden sentir. Son los “no
oyentes”. Ningún rumor. No es un sonido, un ruido, un susurro.
No un alboroto, un murmullo sumiso, un canto lejano, una alegría
rizada, un chirrido de cigarra. Nada tipeteo de lluvia o quebrantar
de resaca, o zumbido de trueno. Jamás palabras dulces de amor,
llantos de niños gemidos de dolores. No un estornudo de hojas,
un silbido de viento, un grito, una melodía, una música.
Ninguna voz para murmurar, para aullar, para invocar, para rogar. Jamás
una voz, para llamar, para buscar, para hablar. Jamás el sonido
del “tu” nombre. Jamás la magia del “su”
nombre. Jamás. Silencio: más que las inaccesibles altitudines
de un monasterio tibetano, más que entre las místicas
sombras de una antigua claustral, más ahora que en el desierto,
entre las piedras consumadas de un escondido yermo o en la soledad infinita
del océano. Ningún rumor, ningún eco. El silencio.
Es la patria de la comunidad de sordos.
Pensamientos, imágenes, miedo, y sentimientos buscan senderos
imposibles para transformar en palabras y sonidos. Brincos, sueños
y deseos se derrochan antes de golpear al corazón y a la mente
de los “otros”, retenidos sobre el umbral de la sociedad
de la palabra, vacilando sobre el limite invisible que separa el silencio
del sonido. Pero es también, un mundo donde cada vibración,
cada palpito, cada pequeña evaporación, cada ligero de
temblor del alma transformada en lenguaje pleno e intensivo, vasto y
profundo, único y esencial como linfa que alimenta y nutre la
vida. Comunicar. Comunicar con los “oyentes” padrones de
la palabra, dominadores de los sonidos, constructores de la sociedad
del rumor, indiferentes protagonistas de una civilización que
produce exclusiones y crea marginalizaciones, es el drama y el deseo
milenario de la “Comunidad Silenciosa”.
Los sordomudos de nacimiento junto a la edad mayor, se consideraran
inhabilitados de derechos, excepto que el Tribunal le haya declarado
hábiles a proveer las cosas propias. Es el articulo 340 del Código
Civil del 1865, quedado en vigor hasta diciembre de 1938, cuando este
fue modificado el numero y sobretodo, el texto: pueden en fin ser inhabilitados,
los sordos de nacimiento que no hayan recibido una reeducación
suficiente.
Fue una primera señal de cambio.- Los “no” oyentes
iniciaron finalmente a ser sujetos jurídicos y fue el reconocimiento
el derecho de ser y sentirse personas. No gritaron, pero lloraron de
alegría. En realidad, la primera grande conquista legislativa,
aviene en el 1923, el 31 de diciembre, cuando fue aprobada la ley, que
sanciono el derecho a la educación escolástica de los
sordos en la escuela publica. Fue ahora que en Italia, cómenos
el lento, fatigoso, interminable acercamiento del mundo de los “no”
oyentes al mundo de los oyentes, fue en aquel momento, que los sordos
conquistaron el derecho a la dignidad, pero sobretodo fue ahora que
nace la esperanza en un futuro mejor.
El calvario jurídico de los sordos, ha iniciado a los albores
de la civilización, al origen de las reglas, al nacimiento de
las primeras normas sociales, cuando cada pacto, cada alianza, cada
contrato venia sancionado de rituales exigidos con formulas y palabras
sacramentales pronunciadas de alta voz- Los sordomudos no articulaban
palabras, no empadronaban sonidos, no poseían voz; venían
excluidos de cada pacto, de consecuencia de cada derecho. Y continuo
así, siglo tras siglo. En el derecho de la antigua Roma, no lo
reconocía como personas jurídicas. En el derecho romano
clásico eran representados casi siempre por un tutor. Con Justiniano,
viene por primera vez hecha la distinción entre los sordomudos
y sordos accidentales. Necesita llegar al XVIII siglo en Francia, porque
inician las primeras discusiones sobre la capacidad jurídica
de los sordomudos de nacimiento.
Leer las palabras: Así año tras año,
confinados a las márgenes de la vida social, aceptadas con conmiseraciones
soportados con fastidios, los sordos han inventado una propia lengua,
han aprendido con una insuperable maestría a leer las palabras
de los leves movimientos de los labios, han ejercitado la vista haciéndose
un arte capaz de “entender” de cada seña, de cada
más pequeño detalle, de cada imperceptible particular,
la intención y el pensamiento de los interlocutores.
Han tomado como descubrir en el mundo circunstante las evaporaciones,
las impalpables “señales”, las mínimas expresiones
para identificar al amigo y al enemigo, el peligro y la seguridad, la
utilidad y la inutilidad, la aceptación y el rechazo. Han acumulado
en este modo, un inmenso patrimonio del saber y de la cultura: construido
en el sufrimiento conservado al aislamiento, reforzado en la incomprensión,
crecido en la indiferencia, rechazado y desconocido.
De todo esto, es nacida una “comunidad” verdadera, única
y fascinante, rica de historia, de tradiciones, de sabiduría,
fuente de sacrificios, de lucha, de orgullo y de esperanzas. La “comunidad
de sordos” vista en el silencio, aislada e ignorada, casi invisible,
ha encontrado en el tiempo su identidad, formada día tras día
de la inagotable voluntad de obtener el rescate y la integración
de conquistar los derechos soñados y esperados por milenarios
años- Hace algunos años, la “comunidad sorda”
es guiada, por la primera vez en su historia, por una mujer: Ida Collu,
Presidente Nacional del Ente Nacional de Sordomudos.
Quizás,
por esto, las batallas de la comunidad están buscando siempre
más consentimientos y siempre mas adhesiones, también
entre los “oyentes”. Quizás, por esto, la “comunidad
silenciosa” esta adquiriendo conciencia de un rol nuevo en la
sociedad, donde puede llevar un gran y sabio contribución para
la construcción de un renovado sistema social y de una más
avanzada civilización.
La primera gran conquista de los sordos nace en la escuela y de la escuela.
Ida Collu, en tanto la pone al centro de su trabajo: “el niño
sordo, se encuentra de frente a una respuesta socio-cultural, que utiliza
prevalentemente el aspecto vocal, y por así su audición,
para comunicar: propio aquello que le falta! Por cual, aquella que para
un niño oyente es una adquisición espontánea, para
el sordo le viene dificilísimo y fatigoso. Y ahora la comunicación,
que es una exigencia antropológica incomprensible, encuentra
otras vías, disfrutando el canal visual, que en el sordo es integro.
Si viene así a construir, con la comunicación de conceptos,
a través las señas, un nuevo lenguaje”.
Pero la Presidente de ENS, va mucho otro: “Es este el momento
esencial para la vida de un sordo. El niño puede ser colocado
en condición de comunicar con la sociedad de los oyentes en plena
manera y completa, solo si la escuela se abrirá totalmente aplicando,
tras el otro, la resolución de la Unión Europea del 17
de junio de 1988, rebatida el 18 de noviembre de 1988: “ABOLIR
CUALQUIER OBSTACULO AL USO DE LA LENGUA DE SEÑAS"
Francia, un ejemplo para los otros países europeos, están
ya insertando la enseñanza de la lengua de señas en los
programas de las escuelas publicas, iniciando desde la elemental.
Italia, tiene todas las características culturales y sociales,
de por si a la guía de un radical cambiamiento de la sociedad,
por esto, el ENS, quiere que Italia forme el laboratorio más
moderno para la integración global y el modelo más avanzado
de sociedad solidez.
Nuevas Generaciones: La multiplicidad de los modos
de comunicar entre niños rinde posibles integrar los sistemas
consintiendo a las nuevas generaciones de vivir sin barreras: la palabra
no es el solo modo para expresarse. Siempre más la comunicación
visual esta transformando el instrumento más difundido para la
transferencia del saber, de la información y de la cultura. Pero
las televisiones y todos los sistemas en video proponen y buscan siempre
más un lenguaje sintético, hecho de símbolos, de
gestos, de iconos y de expresiones.
Ante
las emociones vienen siempre menos medidos de la palabra y siempre más
productos y transmite a través las imágenes. Los jóvenes
comunican siempre más con módulos simplificados y gestuales,
construidos de hechos nuevos lenguajes y nuevas formas comunicativas.
El uso digital y de los modernos sistemas de videotelefónica
están modificando radicalmente la cultura, los métodos
de vivir, de pensar y de trabajar de las nuevas generaciones. El entero
planeta si había a la construcción de un sistema de vida,
donde serán protagonistas exclusivamente la tecnología
avanzada, instrumentos que están aprendiendo escenarios y posibilidad
de vida inimaginable.
Los sordos empadronaran y usaran mejor de quien sea otro esta tecnología
avanzada, que tras el otro, contribuyen a mejorar y a perfeccionar.
Alcanzan a moverse el mundo del virtual con extrema naturaleza y están
utilizando obteniendo el máximo posible. Es todo esto es natural,
porque la “comunidad silenciosa” posee de siglos, el más
grande y avanzado patrimonio de comunicación global e integrada.
Son los únicos seres vivientes que saben “escuchar con
los ojos”.
La sociedad moderna está descubriendo, que los problemas del
desarrollo más avanzado encuentran respuestas y soluciones propias
a través de la inexplorada riqueza de la realidad social, de
siempre marginada y penalizada. La mejor calidad de la vida se reúne
a través la integración global “débil”
y “fuerte”. La comunidad de sordos, forma así un
bien esencial, que puede consentir de encontrar las respuestas practicas
a la comunicación global, a la movilidad y a la seguridad para
todos, a la integración social en el trabajo y en el tiempo libre,
a la defensa de la salud, a la formación de una cultura sin barreras.
Nacen indispensables trazados de crecimiento de la sociedad y vía
cultural jamás recorrido: basta sacar agua del pozo al “saber
sumergido” del planeta de los diversos.
Es la “revolución” que se propone Ida Collu, una
“revolución” pacifica que rinda la sociedad más
rica y la existencia humana más viviente.
Traducción:
Ernesto Carlos Davis
*Nota: la traducción puede contener imperfecciones