Al inicio de un nuevo milenio la problemática de las Adicciones, el
gran aumento de las ETS (Enfermedades de Transmisión Sexual) y las consecuencias
del VIH-Sida constituyen un fuerte desafío para la humanidad.
A pesar de esfuerzos comunitarios, sociales, sanitarios, orientados
a la prevención y la asistencia ya con recursos públicos o privados,
el Vih-Sida se ha convertido, como lo señala el Dr. Chow de la OMS,
en la principal enfermedad masiva en las dos últimas décadas.
Abrimos aquí, entonces, una serie de interrogantes:
Las respuestas a estas imperiosas demandas son definitivamente negativas.
Tanto las comunidades de inmigrantes e indígenas, como la comunidad sorda donde el código lingüístico no es el castellano, no reciben información o peor aún, la reciben en forma parcial o distorsionada.
Según lo observado en los estudios realizados por Riesgo Cero desde el área de estadística e investigación de su Institución, son preocupantes los índices de desinformación, así como los altos indicadores de alcoholismo y el consumo de otras drogas dentro de la comunidad sorda. Ante esto, Riesgo Cero opera con un equipo interdisciplinario conformado por médicos, trabajadores de la salud, Intérpretes de Lengua de Señas, docentes y elabora junto a dicha comunidad estrategias de prevención con un abordaje integral.
Respetando el código lingüístico y cultural en cuestión, Riesgo Cero realiza material didáctico especifico orientado a educadores formales, no formales y líderes comunitarios. Para garantizar la continuidad de sus acciones perfeccionan al personal sanitario en LSA y propician el trabajo compartido con interpretes y auxiliares.
Por ultimo, son necesarios datos sobre la realidad cultural de esta
minoría. Para este objetivo se operan con líneas de investigación que
nos permiten conocer, elaborar encuestas, obtener cifras, e implementar
dispositivos adecuados para esta población.
La misión de Riesgo Cero ayudara al cambio desde la
exclusión social, educativa y de competencia sanitaria hacia la promoción
de conductas saludables y de aprendizajes de estas conductas. Debemos
garantizar la igualdad de posibilidades considerando la diversidad de
lenguas y de culturas, es decir, respetar los derechos de las personas
para lograr una verdadera equidad.
Profesora Liliana Claudia Rubinstein
Coordinadora general de Riesgo Cero