Tras mas de dos
años entre rejas en la India, Ian Stillman, defensor
de los derechos de las personas Sordas, regresó el pasado
13 de diciembre al Reino Unido indultado por el gobierno hindú
a condición de que abandonara su país de adopción.
Ian fue recibido con aplausos y gritos de apoyo por su familia, amigos
y seguidores a su llegada al aeropuerto londinense de Heathrow. Rodeado
de sus seguidores y entre bienvenidas en lenguaje de signos, su gran
sonrisa y la agitación con que movía los brazos para saludar
mostraban su enorme alegría por estar de nuevo entre amigos.
Pero Ian ha proclamado que continuará luchando por limpiar
su nombre.
Ian mostró su agradecimiento a quienes lucharon por lograr su
liberación y lo extendió también a las autoridades
hindúes por haberle concedido la libertad.
La increible historia de la condena penal de Ian Stillman
arranca en agosto de 2000, cuando fue detenido en el norte de la India
acusado de llevar 20 kilos de cannabis.
En el juicio, el juez se negó a creer que era persona
Sorda, y le denegó un interprete. Ian negó los
cargos, pero fue declarado culpable y condenado a 10 años de
cárcel.
En la India, donde Ian pasó 30 años construyendo
una organización benéfica para ayudar a las personas Sordas,
hubo protestas exigiendo su puesta en libertad.
Los activistas de los derechos de las personas Sordas lanzaban campañas
en todo el mundo para hacer saber la injusticia cometida por
Ian y luchar por su liberación. Durante su estancia en la cárcel,
Ian recibió miles de cartas de apoyo.
Aunque Ian es diabético, se le denegó una dieta
especial, de modo que dependía de su hijo y otros visitantes
para obtener frutas, verduras y agua limpia.
No obstante, parece que Ian no da por terminada su lucha.
Conocido por su estoicismo, afirma que desea regresar a la India
en el futuro para proseguir su labor benéfica.
Para que esto sea posible, tendrá que seguir luchando
para que el tribunal hindú revoque su condena completamente.